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Moderniza tu empresa 

con liderazgo empático

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El doctor Guillermo Velázquez Valadez  tiene un compromiso con el país y lo demuestra a través de ofrecer el resultado de una investigación, el cual busca transformar el modo de pensar y actuar de los mexicanos para se conviertan en individuos solidarios y por ende más eficientes y productivos en todos los ámbitos.

 

Este método, denominado Liderazgo Empático, también puede ser utilizado, de manera exitosa, en las empresas o en la administración pública para lograr una mayor eficiencia.

 

Velázquez Valadez, quien es subdirector Académico y de Investigación del Centro de Investigaciones Económicas Administrativas y Sociales (CIECAS) del IPN, advierte que México no cuenta con un modelo propio de liderazgo que dirija y organice los modelos de gestión de las empresas, o un modelo de liderazgo que reafirme la identidad como mexicanos, como sucede en otros países industrializados.

 

De ahí que el liderazgo empático, investigación iniciada en 1993, debería ser aplicada como una materia desde la preparatoria o incluso en las universidades, para lograr ese cambio de país a mediano plazo, y que en las empresas  se traduciría en beneficios económicos por la reducción de costos, el mejoramiento de los procesos, reducción de tiempo y el incremento de la utilidad.

 

Pero sobre todo, dijo, el beneficio más importante, que se va a tener a largo plazo y al que se le debe de apostar, es la construcción de una identidad organizacional del empleado y la empresa, y por lo tanto el compromiso y la lealtad.

 

Señaló que las partes del liderazgo empático son: Lo primero es aplicar la empatía, pero con energía, con vitalidad, pues el líder debe emanar esa energía para contagiar; la otra es hacer una planeación con proyección, con visión, “hacia donde queremos estar en el mediano plazo”.

 

También se debe desarrollar y fortalecer la innovación, la creatividad, pero esta innovación tiene que estar respaldada en la

investigación, en un método serio y riguroso, no en la improvisación.

 

La calidad no debe quedar fuera, expreso, pues es muy importante dentro de nuestro sistema de gestión y por último la orientación pero con orden, puntualizó.